Un poema para ti: cigarro.

Oh! Cigarro, por qué me haces daño?

Eres tan hermoso, pero tan dañino,
que ni mi mente, ni mi corazón te soportan,
dañas el planeta, lastimas animales, matas personas,
lo sé, lo sabemos, pero te seguimos queriendo,
Te quiero hasta los pulmones.
Aunque me maltrates, aunque me dañes, te sigo queriendo.
¿Como dejarte? Cuando no quiero hacerlo...
Vas contra mi moral, vas contra mi forma de ver la vida,
vas en contra de la salud, vas en contra de todo, pero eso no te importa.
Tú sigues ahí, humeante y valiente, mostrando tu calor ante todo.
Lastimas por donde pasas, lastimas todo lo que tocas, destruyes a cualquiera.
No importa su tamaño, su raza, su color, ni su edad, lo dañas todo.
A veces me identifico contigo, ¿será por eso que te quiero?
Pero yo sé que solo busco excusas...
Te quiero por tu hermosura, te quiero por tu calor, te quiero por tu humo, te quiero por tu olor.
Oh! Cigarro, por qué me haces daño?
Oh! Cigarro, qué debo hacer?

Quiero encontrar a alguien a quien poderle decir, eres mi cigarro, para poder alejarme de ti.